Rompepistas tiene diecisiete años, es punk, vive en el extrarradio de Barcelona y lo hace por y para la música: Generation X, los Clash, los Jam, Las Duelistas… Este último es su propio grupo, donde toca la guitarra y berrea al micro desde detrás de sus lupas de miope. Carnaval, su mejor colega, se ocupa de aporrear la batería, y Clareana, su ex novia y su mayor cargo de conciencia desde que una vez la humilló en público, rasguea un bajo rebosante de ira. Se trata de tocar y tocar y bailar y bailar para mantener a raya la tristeza. Para no empezar a llorar nunca más. Porque al empezar a tocar todo cambia. Toda la mierda se va.

uando las personas no pueden o no quieren hablar entre sí, se crea un conflicto. La encantadora pensión para ornitólogos La Ballade ha sido adquirida por una familia alemana y los habitantes de la pequeña aldea de Ballot-sur-Mer, en Francia, tienen dificultades para aceptarlo. Sebastien, el Don Juan local, siente simpatía por la dulce Asem, pero sus amigos no pueden permitir que eso suceda. Asem no se siente bien, pero no puede abrir su corazón a nadie. El fanático Réné Ledur sólo aprendió a pensar con consignas y desahogarse con acoso y malicia. Parece que nadie puede comunicarse correctamente en el pequeño pueblo costero.

En enero de 1939 decenas de miles de españoles salieron del país por la frontera francesa. Uno de ellos fue Antonio Machado. Nuestro poeta más universal se enfrentó a una marcha angustiosa, enfermo, junto a su familia y su anciana madre.
Pero el exilio para él había empezado casi al principio de la guerra. En noviembre de 1936, el 5º Regimiento quiso poner a salvo la cultura. Eso exigió el traslado de Antonio Machado y muchos otros intelectuales a Valencia. León Felipe y Rafael Alberti consiguieron convencerlo. No querían que corriera la misma suerte que Federico García Lorca, asesinado en Granada el 18 agosto del mismo año.

De la contraportada: Walter Moers es uno de los humoristas alemanes más exitosos de su generación y también uno de los más productivos. Empezó a publicar con regularidad en las revistas satíricas Titanic y Kowalski. En 1990 le llegó el merecido éxito de público y una lluvia de premios de la crítica con El pequeño hijoputa (Das kleine Arschloch), que lleva vendidos decenas de miles de ejemplares de todos sus álbumes y productos de merchandising en toda Europa. Otra de sus obras más exitosas es Adolf, una farsa en la que Hitler resucita en nuestro presente e intenta continuar con su "trabajo" allá donde lo dejó.

Koyuki es una joven de 16 años que contrae matrimonio con un hombre 20 años mayor que ella y que se oculta tras una máscara de zorro. Aunque ella hace todo lo posible por acercarse al que ahora es su marido, parece que Shin esconde secretos que van más allá de su rostro… Esta pareja torpe e inexperta protagoniza un romance más dulce que cualquier primer amor.

Después de ser secuestrada por Vance y posteriormente escapar, Tess ahora es oficialmente parte del equipo de investigación junto con la Agente Reilly. Pero a pesar del peligro constante de los asesinos al acecho que ya casi la matan una vez, la joven se niega a desempeñar un papel pasivo. Su investigación la llevará lejos de Nueva York, bajo la protección de Sean Reilly, quien está a punto de enfrentar una terrible crisis de fe.

Corre el año 1890. El National Geographic, recién fundado, organiza una expedición al África Central para capturar al último dragón. Para dirigir la expedición han contratado al reputado cazador Buffalo Bill, acompañado de Calamity Jane, y un pequeño duende llamado Adam Wu. Pero no son los únicos: Inglaterra ha organizado una expedición paralera desde el Cairo, encabezada por Allan Quatermain para ser ellos los primeros en capturar al dragón.

Ya conocen a Dickie, este antihéroe bigotudo con cabeza de Playmobil que se pasea por todas las épocas de la historia. Tras sus aventuras disfrazado de hijo de Hitler, se publica esta colección de gags en los que Dickie recorre las secuencias de grandes clásicos del cine como Tiburón, Star Wars o Frankenstein, y demuestra su increíble sentido de la pifia. Para nuestro sádico deleite, Pieter de Poortere es el paladín de la irreverencia y el mal gusto liberador, machacando las escenas grabadas en el imaginario colectivo. Un álbum delirante, hilarante, que debería atraer a una audiencia al menos tan grande como la del Titanic de Cameron.

España, año 1980. Enrique vuelve a casa después de varios años de ausencia. Quiere hacer las paces con sus padres, después de mucho tiempo sin relación. Desgraciadamente estos ya han fallecido, y la única familia que le queda es su tía Rocío y sus primos pequeños Miguel, Felipe y Raquel.

Blanca sabe que los fantasmas no existen. Ni los aliens. Nada de todo eso existe. Existe su amigo Eric, existe Sam, a quien no veía desde hace tres años y existe Cookiefire, que lee mangas cursis y lo peta en YouTube.

Antisol es una historieta sin palabras de Kim DuChateau que no se enfoca en la broma absurda, pero no es menos extraño por eso. El sol y su arcángel atormentan al hombre con calvicie y otras molestias.